viernes, 25 de octubre de 2019

¿Conoces tu tipo de piel?



¡Hola chic@s!

Llega un momento en nuestra vida en el que descubrimos que las cremas que hasta ahora habíamos utilizado, esas genéricas que encuentras en todos lados, empiezan a no funcionar en tu piel...

Esto se debe a que, conforme nos hacemos mayores, nuestra piel se "asienta" y por fin nos dice lo que realmente es: seca, sensible, mixta, grasa...
Pero ¿cómo reconocer nuestro tipo de piel para cambiar nuestros productos por los que nuestra piel realmente necesita?

¡Desde Farmacia del Río te lo contamos en nuestro blog! Seguro que os ayuda a más de un@...

Características de la piel seca
Si tu piel tiende a descamarse y es áspera, es decir, carece de hidratación y lípidos (grasas), tu piel es seca.
Este tipo de piel es menos elástica, más tirante y tiende a picar, además es fácil que reaccione negativamente a agentes externos.

La clave para cuidar este tipo de piel es la hidratación y nutrición, cuanto más dure ¡mejor!

Características de la piel mixta
Este tipo de piel se llama así porque combina las necesidades y características de dos tipos de piel: la seca, la normal y la grasa.
Esta piel tiene aspecto brillante y desarrolla impurezas especialmente en la zona T (frente y nariz).
Sin embargo, la zona de las mejillas es normal o seca.

La clave para este tipo de piel es mantener el equilibrio hídrico natural y mantenerla siempre limpia.

Características de la piel normal
Suave, elástica, pequeños poros y tono rosado. Esta piel es fuerte y aunque cometas algún que otro error en su cuidado apenas lo notarás.

La clave para este tipo de piel es hidratación y protección.

Características de la piel grasa
Este tipo de piel produce más sebo del necesario por lo que siempre tiene ese aspecto brillante.
El estrés, las hormonas y la genética son los desencadenantes de la aparición de granitos y espinillas.

La clave para este tipo de piel es el uso de productos anti-bacterianos y la limpieza diaria.

Características de la piel sensible
La piel sensible es mucho más susceptible a los factores externos que el resto de tipos de piel.
El estrés, el aire, la humedad, la calefacción e incluso los rayos UV hacen que pierda su equilibrio y pique, se vuelva tirante y se enrojezca.

La clave para este tipo de piel está en el uso de productos que la calmen y alivien mientras refuerzan su barrera de protección natural.

¿Has descubierto cual es tu tipo de piel? Si tienes dudas puedes consultarnos en Farmacia del Río donde además te asesoraremos sobre cuales son los productos de cuidado e higiene diarios que necesitas para tu piel.

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